0.0
Corren
–cómo
corren–
por
subirse.
1.0
El
ferrocarril
acaricia
estructuralmente
a
los migrantes.
2.0
Allí
van en el techo,
bajo
el sol asesino,
mientras
escuchan
los
corridos metálicos
del
tren de la muerte.
2.1
Alondras,
hombres,
hembras
sustantivas:
duren,
sobrevivan.
2.2
Pequeños
niños
sin
tendencia, sin norte:
duren,
sobrevivan.
3.0
Allí
vienen los mareros.
Allí
vienen los narcotraficantes.
Allí
vienen los violadores.
Allí
vienen los ladrones.
Allí
vienen los soldados.
4.0
Los
migrantes piden al Cristo mineral:
4.1
Agua,
quiero agua.
4.2
Es
la plegaria de ellos,
los
que quedaron triturados,
en
el tren sangriento de la muerte.
5.0
Hacen
amigos,
que
luego no verán jamás.
Ríen,
y luego mueren.
5.1
Los
indocumentados
van
reventando
como
pop corn
en
el tren de la muerte.
5.2
Joyas abolidas
en
las líneas
del
ferrocarril.
5.3
El
tren de la muerte
descarrila
y colisiona,
en
la curvas sin brisa,
contra
la sustancia injusta
de
las cosas injustas.
(No, nunca olvidaremos sus risas.)
6.0
Decididamente
estamos muertos.
Estamos
aterrados,
pero
sobre todo estamos muertos.
7.0
Si
no les parece mal, me gustaría
hacer
una plegaria por ustedes,
forasteros
sin rostro, y es:
7.1
Que
no sean sus cuerpos
el
abono
de
las configuraciones desérticas.
8.0
Crucen.
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