Lamento
no
poder
escribir
como
uno de esos
poetas
genios
que
lees
en
tu móvil
antes
de dormir.
Es
cierto
que
no tengo
la
madurez,
la
hondura,
la
imaginería
requeridas.
Por
otro lado,
no
he venido
al
mundo a llenar
tus
expectativas
literarias,
ni
me sentiré
más
completo
por
ofrecerte
un artículo
o producto poético
o producto poético
satisfactorio.
No
soy una tienda de retail, ves.
No hay comentarios:
Publicar un comentario