estoy
cansado
pero no
puedo dejar de teclear
por mis
dedos se escapa la bruma de la vida
hacia
las dimensiones ptolomaicas
sobre
mis hombros
un
sepulturero me corrije las comas
soy yo,
una silla, una mesa, una compu
sobre el
tierral
entre
vagas piedras ensalivadas
haciendo
los poemas descenditivos
que no
podrás sacarte de la cabeza
moriré
tecleando
un
infarto de miocardo
y
tardarán tres libros
en encontrar mi cadáver
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