La vida es ver
el arpa
a la misma monótona
distancia
de todos las paredes.
Un anciano extiende
la mano hacia la alacena
de arriba, murmurando
palabras iterativas, borrosas.
Angelina
usa sus mismos dientes
para comer,
y Brad no sabe otra vez.
Una uña, un abrazo, televisión.
Esperarás muriendo
a tus pequeños hijos
en la parada del bus.
Otro mayo nos vino
a lamer el esófago
con su lengua ácida.
Haz dejado los guantes
nuevamente sobre la coagulada
consola de Playstation.
Los budas se aburren
irradiando mil soles.
Toda locura ha sido vista.
Todos los clítoris son un clítoris
rosado, hambriento.
Una vela de humo y de cambiar
está intacta sobre la mesa
del comedor en donde
los platos ya han sido levantados.
He sido, soy lo vivo,
lo que va en las calles con un martillo.
Pero eso tampoco tiene
demasiada importancia.
2 comentarios:
Mucho gusto....me gustó.
A la orden
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